Andoain 28/11/2014
Kaleratzeak Stop Desahucios ha manifestado su «profunda decepción» con los partidos políticos representados en el Ayuntamiento por el tratamiento que han dado a la propuesta de poner en marcha un plan contra la vivienda vacía y de incentivo del alquiler.
La plataforma recuerda que esta propuesta consistía básicamente en la aprobación de un recargo del IBI del 150% a las viviendas vacías, salvo las exenciones contempladas en la propuesta, y la creación de una partida equivalente a la previsión de recaudación del recargo destinada al incentivo del alquiler.
Con esto, añade, se pretendía ofrecer una alternativa real a las 362 familias de Andoain inscritas en Alokabide para el alquiler social «y perdidas entre una lista de 47.000 personas en Euskadi, sin ingresos para acceder a otras opciones de vivienda, y casi la mitad de ellas pertenecientes a colectivos especiales como minusválidos, víctimas de violencia de género, menores de 30 años y mayores de 60». Además, se contemplaba proteger a los propietarios que alquilasen sus viviendas a estos colectivos, proporcionándoles un seguro ante impagos y frente a daños en la vivienda o subvenciones para rehabilitación.
La plataforma añade que «al recuperarse lo invertido en el plan con lo recaudado con el recargo, esto no iba a suponer esfuerzo económico a las arcas municipales».
Propuesta a los partidos
Stop Desahucios asegura que ya en 2013, tras rechazar el Pleno la propuesta de recargo del IBI que planteó Bildu, se avisó a los partidos que volverían a tratar el tema aunque con un planteamiento diferente al que realizaba la coalición abertzale. Y así fue. Este verano, esa propuesta llegaba a los representantes políticos junto con un emplazamiento para celebrar una reunión en la que la plataforma y los partidos políticos comunicaron y estudiaron las propuestas con la intención de consensuar un texto definitivo.
Mociones en octubre
Tras estos contactos, Stop Desahucios presentaba en septiembre dos mociones sobre Alokabide y las viviendas vacías de los bancos, y manifestaba públicamente su pretensión de presentar un plan contra las viviendas vacías y para incentivar el alquiler en el pleno de octubre en el que se debatirían las tasas. El pasado mes se celebra una nueva reunión con Bildu, PSE-EE, PNV y PP en la que, según Stop Desahucios, «nos comunicaron que, dada la situación de intervención que hay en el Ayuntamiento de Andoain, no se podía proponer que la recaudación del recargo se destinase al incentivo del alquiler, tema que consultamos con la interventora y salvamos con otra nueva propuesta pidiendo a los partidos un compromiso serio para que en los próximos presupuestos se incluya una partida de gasto para el incentivo del alquiler».
La plataforma señala que su impresión era que se habían salvado todos los escollos para que el tema se incluyera en octubre en la sesión plenaria en la que se debatieron la tasas, «ya que ningún partido nos comunicó que se opusiera frontalmente a nuestro plan», por lo que registraron su pretensión a través de una moción.
Sin embargo, en la junta de portavoces que se celebra días antes del pleno para conocer los temas que se incluirán en el orden del día, la alcaldesa comunica a la plataforma que su propuesta no se incluía en la sesión plenaria «porque habían surgido dudas jurídicas y competenciales en dicha junta y se decidió que, en caso de que siguiéramos adelante, lo hiciésemos mediante alegaciones a las tasas aprobadas».
Pese a que Stop Desahucios había decidido continuar con esta vía y presentar alegaciones, finalmente no ha podido realizarse porque, según informan, «el Ayuntamiento comunicaba que existían dudas sobre la posibilidad de que pudieran utilizar esta fórmula».
La plataforma traduce esta cronología de los hechos en «una falta manifiesta de voluntad por parte de los grupos municipales de tratar con seriedad el problema de la vivienda vacía», y afirman que «sí se puede, pero no quieren».
Abordar la problemática
Representantes de Stop Desahucios han señalado que la problemática de la vivienda vacía debe abordarse con urgencia a nivel municipal, ya que aseguran que el Plan Director de Vivienda del Gobierno Vasco no da respuesta a la demanda de alquiler social «y ni siquiera cumplirá los objetivos planteados». Añaden que tampoco los planes Bizigune y el renovado ASAP cumplen las expectativas previstas «puesto que el primero perdió gran parte de su atractivo al reducirse a 450 euros el máximo a percibir por el propietario, y en el segundo apenas hay 15 inmuebles inscritos en Gipuzkoa en su web».
Texto por Marivi Olano
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